Un sueño es aquello que nuestro inconsciente deja libre sin control. Es aquello que deseamos con toda nuestra alma, sin reservas; otras veces es aquello que nos negamos a nosotros mismos, así que lo soñamos, para tenerlo por un breve período de tiempo; y aquello que guardamos para evitar el dolor, pero que surge libre en ese lapsus.
Un sueño también son las esperanzas y metas. Aquello por lo que luchamos y por lo que nos levantamos cada día. Aquello que nos ilusiona y nos da fuerzas para seguir adelante aunque los obstáculos surjan a nuestro paso.
Y también es ese momento increíble, un momento que puede durar un segundo o el resto de tu vida, y que te deja sin respiración sólo porque esté sucediendo.
Puedes perder sólo uno de los sueños, o perderlos todos. Cada sueño tiene su momento y lugar. Por mucho que queramos, alguno se esfuma con el momento, porque su momento pasa, se va, y no hay manera de recuperarlo. Puede que la capacidad de soñar no se nos vaya, pero sí el momento para cada sueño.
¿Qué sueño has perdido tú?
Puedes perder sólo uno de los sueños, o perderlos todos. Cada sueño tiene su momento y lugar. Por mucho que queramos, alguno se esfuma con el momento, porque su momento pasa, se va, y no hay manera de recuperarlo. Puede que la capacidad de soñar no se nos vaya, pero sí el momento para cada sueño.
¿Qué sueño has perdido tú?