Hemos ido avanzando, dejándonos llevar por donde estaba el hilo, hasta que de repente nos encontramos que está roto, su extremo en nuestras manos, miramos al horizonte y no se atisba el otro pedazo.
Es hora de buscar nuestro camino por nosotros mismos...
Me ha despertado un sueño, intranquilo, que significaría dejar de soñar, porque incumplías aquellas condiciones que no te impuse, que salieron solas de ti, pero que hicieron que considerase que hubiera posibilidad.